Esta es Ayla, tenía dos meses y medio cuando Krista la encontró, y no podemos comenzar a describir cuánto sufrimiento padeció: hambre, sarna, temblores mientras se arrastraba por el suelo…
Krista la llevó al veterinario. El estado de salud general de Ayla es realmente malo, según un control clínico. Ella debe haberse comido la piedra. Es otra señal de que tenía deficiencia de calcio, lo que le produjo una malformación en ambas patas delanteras, obligando a Ayla a arrastrarse por el suelo, provocándose una abrasión severa y daños a sí misma con el tiempo…
Ayla se encuentra actualmente en el hospital y están haciendo todo lo posible para curarla. La recuperación puede tardar hasta tres meses con un cuidado cuidadoso, pero lo más importante es que ahora está segura con Little Steps.