La historia de este infeliz perrito debería hacernos reflexionar sobre las decenas de miles de perros que son abandonados cada año. Cada año, sólo en Grecia, personas egoístas y desconsideradas abandonan hasta 50.000 perros y 80.000 gatos en las calles.
Estos animales contribuyen al ya terrible número de perros callejeros en nuestro país, que se estima en unos 900.000. Estas asombrosas estadísticas capturan una realidad tangible pero que a menudo se pasa por alto. Si alguna vez te has preguntado dónde terminan todos estos animales que repentinamente se quedan sin hogar, la historia de hoy podría darte una explicación.
Al parecer, la mayoría de los perros abandonados eligen zonas pobladas por humanos, ya que allí es más sencillo conseguir comida. Pero no faltan animales que prefieren habitar en zonas aisladas, como el bosque o incluso los vertederos, quizás porque les aterroriza el mundo exterior.
Esta es la situación de este perro abandonado, que optó por pasar su vida en un vertedero para evitar el contacto humano. El perro podría esconderse de los peligros de la actividad humana en este lugar hostil y amenazador. La selección de este animal solitario y sufriente puede parecer ridícula, pero es precisamente este elemento el que demuestra la criticidad de las condiciones de los animales abandonados.
Aunque el perro pasó meses buscando comida en la basura, aparentemente esto fue insuficiente para mantenerlo sano. Las fotos de su cuerpo extremadamente delgado y desnutrido así lo atestiguan. A pesar de la falta de comida, el perro nunca abandonó ese lugar. Afortunadamente, alguien de gran corazón se cruzó en su camino, permitiéndole darle un nuevo giro a su triste vida.
El camino de curación física y emocional del cachorro ha dado sus frutos gracias a esta persona, aunque las condiciones del perro todavía están lejos de ser las ideales. Sin embargo, no falta el optimismo por un futuro mejor para este adorable cachorro, y estamos seguros de que los meses tristes en el basurero serán un recuerdo pobre y lejano.